El jueves, quedando pocos días para las vacaciones, toda la escuela tuvo una jornada de convivencia en el Parque del Lauredal. Fuimos las familias, los peques y los docentes juntos desde el cole.
Las niñas y los niños son unos campeones, desde los mas pequeños hasta los mayores caminaron sin quejas porque sabían que la recompensa merecía la pena: un parque de juegos de arena que les encantó y comida rica que las familias aportaron a la actividad.
Lo pasamos genial entre risas, charlas, juegos, arena y mesas repletas de platos típicos de una jornada como esta. Es una experiencia muy bonita que merece la pena seguir conservando porque se crea un clima muy acogedor y se cuida la relación familia-escuela que tan esencial es en todas las etapas escolares, pero si cabe, aun más en Educación Infantil.
¡Estamos deseando repetir el año que viene y que sea, al menos, tan divertida como esta!
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